Los fabricantes de motores y maquinaria de construcción deben hacer frente al más difícil todavía en materia de reducción de emisiones con la entrada en vigor este mes de la legislación sobre emisiones EU Stage V. Volvo CE elevará el listón de la potencia y el rendimiento hasta cotas nunca vistas con una nueva tecnología de motores diseñada para avanzar en el camino de un futuro más sostenible.
La legislación Stage V impone a todos los fabricantes de motores de entre 19 kW y 560 kW unos límites en el número de partículas y obliga a integrar filtros de partículas diésel (DPF) en el EATS del motor de las máquinas. Además, también se han definido unos límites más estrictos de emisiones durante la utilización de la máquina.
En el caso de los motores con un intervalo de potencia por encima de 130 kW y por debajo de 56 kW, los límites son vigentes desde el 1 de enero de 2019. Sin embargo, en los motores con un intervalo de potencia de 56 a 130 kW, la legislación entrará en vigor un año más tarde, el 1 de enero de 2020. En esta clase de motores, Volvo CE ya va un paso por delante de la legislación, pues la empresa decidió introducir motores Stage V en todos los intervalos de potencia ya a principios de este año.
Mats Andersson, vicepresidente de marketing y ventas de la región EMEA de Volvo CE, asegura: “Los fabricantes tienen cada vez más presión para garantizar que los motores cumplen con las normas de emisiones más estrictas y esta nueva normativa de la UE es la más estricta jamás aprobada. Sin embargo, con la rápida introducción de motores conformes con Stage V Volvo CE ha demostrado la voluntad de ayudar a sus clientes de hoy a avanzar hacia un futuro más sostenible”.
Los avanzados motores Stage V no solo se han diseñado para ajustarse a estos estrictos requisitos, sino también para poner en manos de fabricantes de equipos y operadores diferentes ventajas, como por ejemplo:
Esta competitiva solución será básicamente idéntica que para los motores Stage IV, con la excepción del DPF, que ahora es obligatorio en máquinas con motores de 19 a 36 kW.
El sofisticado sistema se ha sometido a exhaustivas pruebas en las condiciones de trabajo más exigentes, para garantizar que es capaz de dar respuesta a las necesidades de los clientes, tanto hoy como en el futuro. El nuevo sistema integra un enfriador del aire de admisión, que enfría el aire que entra en el motor para mejorar la eficiencia, y un turbo de geometría variable (VGT), diseñado para optimizar la proporción aire-combustible del turbo y ajustarla si cambian las condiciones, o bien un turbo de geometría fija con una válvula de salida de gases sobrantes (WG). El DPF está diseñado para eliminar las partículas del diésel o el hollín de los gases de escape de un motor diésel, mientras que el catalizador de oxidación diésel (DOC) oxida los hidrocarburos y el monóxido de carbono para convertirlos en dióxido de carbono y agua.
La regeneración pasiva del sistema de postratamiento acaba con las paradas imprevistas durante el trabajo. Las pruebas realizadas hasta ahora demuestran que ya no hace falta la regeneración con el vehículo parado en condiciones de trabajo normales, ya que la temperatura del escape se mantiene automáticamente en un nivel óptimo.
Por último, la función de recirculación de los gases de escape (con o sin refrigeración) reduce las emisiones mediante el reciclaje de una parte de los gases de escape en el motor.
La eficiencia en el consumo de combustible y la disponibilidad son dos de las grandes prioridades de Volvo CE, por lo que los clientes pueden tener la confianza de que sus máquinas cumplirán con las normas sobre emisiones más estrictas y estarán optimizadas pensando en el futuro.
Volvo CE utiliza las últimas tecnologías del grupo Volvo para estar siempre a la altura de las expectativas de sus clientes. Además, la red internacional de servicio posventa de la empresa garantiza la mejor respuesta a las necesidades de los fabricantes de equipos originales y los operadores.