La reconstrucción de la autopista costera E39 no es solo el mayor proyecto de infraestructura realizado en Noruega, sino que además incluye el que será el tramo de carretera submarino más largo y profundo del mundo, el túnel Rogfast. Este innovador y apasionante proyecto es la octava entrega en la lista de megaproyectos de Volvo Construction Equipment (Volvo CE), y cuenta con una profundidad de hasta 392 metros por debajo del nivel del mar.
La reconstruida ruta de la autopista costera E39 disminuirá el tiempo del trayecto entre Trondheim y Kristainsand de 20 a tan solo 11 horas, y tendrá un coste de 39 mil millones de dólares. Y el túnel Rogfast, que se espera que finalice en 2026, es una parte importante de esta mejora. Y es que está proyectado para ser el túnel de carretera submarina más largo y profundo del mundo, ya que medirá 27 kilómetros de longitud y alcanzará los 392 metros por debajo del nivel del mar en su punto más profundo.
Pero construir túneles a esta profundidad supone todo un desafío. La estructura incluirá la construcción de dos túneles separados destinados al tráfico, con el objetivo de que el viaje sea lo más seguro posible para los usuarios de la carretera. Asimismo, dispondrá de pasajes que conectan los dos túneles cada 250 metros, lo que permitirá una salida rápida y sencilla en caso de emergencia.
Volvo CE mostrará su labor en este proyecto vanguardista como parte de la última entrega de la premiada Lista de megaproyectos. Tiffany Cheng, directora global de Comunicaciones externas de Volvo CE, afirma: «Cuando esté finalizado, este túnel hará que la vida de las personas que viven y trabajan dentro y fuera de Noruega sea mucho más sencilla. En Volvo CE estamos orgullosísimos de participar en este impresionante proyecto y de haber contribuido a mejorar el acceso a este hermoso rincón del planeta».
Para obtener más información, visite la revista Spirit.
Imagen 1: Se construirá el túnel Rogfast a una profundidad que llegará a los 392 metros bajo el nivel del mar.
Imagen 2: Este proyecto pionero a lo largo de la costa de Noruega persigue reducir a la mitad la duración de los trayectos.